lunes, 1 de abril de 2013

Poemario



Autora Damalys Martínez. Universidad Hermanos Saíz de Pinar del Río



 
Nada
 ¿Qué queda de aquel amor?

Solo algunas cartas y rosas secas
que se destruyen con el tiempo,
queda un vacío inmenso, un montón de dudas
                           y la certera pregunta de si pudo ser diferente.


Queda esta melancolía presta a morir,
este recuerdo que se desvanece,
un montón de historias, una foto,
                                                           tu imagen
                                      y el cariño algo gastado
                                     por la ausencia de un buen uso.

Queda aquella soledad esperanzadora,
que te veía venir,
aún cuando no era hora.

Queda este poema, una canción,
quedan huellas en mi corazón,
queda tu nombre,
y un banco en cualquier parque
en el que olvidamos la pasión.


Presencia

Me convertiré en tu sombra
por si un día te falta un amigo.

Me sentaré a tu lado
sin hacerte sentir mí presencia
                                                     y seré feliz,
porque vivo para cuidar tus sueños.

Compartiré tu risa
Y tomaré para mí la tristeza
que pueda tocarte
                             Y seré feliz.

Impediré que las lágrimas
                                           empañen tu mirar
y humedezcan tu mejilla,
y tú como un niño ingenuo
 pensarás que todo es magia,
sin sospechar que existe un ángel que vela por ti,
por tu felicidad
y anhela tu amor.

Soy un ser invisible,
Un recodo en el camino.

Soy aquella a quien nunca mirarás,
A quien no recordarás.

Soy quien te haría feliz
 Si pudieras siquiera sentir mi tenue presencia.

Soy algo insignificante
Comparado con la grandeza de tu mirada,
Por eso no me vez,
Y tu corazón aunque inmenso
Es incapaz de sentirme.
                                           
Melancolía.

El sonido del timbre, una mirada y la falta de largas explicaciones.
 Queda poco de aquellos días, nuestras travesuras de niños se encuentran en aquel cofre de recuerdos, en el fondo de aquel cofre.
Hoy somos dos desconocidos, pero queda esta melancolía, esta ausencia de palabras compartidas.
Nuevamente el sonido del timbre, me alejo de la puerta aunque mis pies me conducen a ella, abro y ahí estás tú, como si todo fuera un sueño.
Era un sueño, nunca sonó el timbre y yo, jamás me decidí a abrirte la puerta.



A ti

Te imagino agotando mi paciencia,
Destruyendo lo que tú llamas razón.

Te imagino alegrando mi existencia,
Dando fuerzas a este pobre corazón.

Te imagino caminando por las calles,
Dando a todo una pizca de pasión.

Te imagino y no te tengo,
Te necesito y no te siento,
Te busco y no te veo,
Entonces te sueño, te quiero,
Recuerdo que no eres más
                                   que un loco amor
y este mundo es de cuerdos.




Te encontré

Te encontré aún sin buscarte,
Como se encuentra un retrato, una nota.

Te encontré entre palabras vacías,
Entre pedazos de luna y de sol.

Te encontré cuando perdía el amor,
Cuando olvidaba mis sueños.

Te encontré sin que tú me encontraras,
Yo era hoy,
No existía ni ayer ni mañana,
Pero te encontré.


Qué sería de mí

Si no te hubiera conocido,
Mi corazón sería un témpano de hielo
Olvidado por el tiempo.

Si no te hubiera conocido
Mis poemas serían algo abstracto,
 olvidados por el tiempo.

Si no te hubiera conocido,
La enamorada que vive en mí,
Muy pronto habría muerto.

Si no te hubiera conocido,
Continuaría siendo la niña
Que nunca creyó en los sueños.

Si no te hubiera conocido…


Historias

Dicen que era tarde
 y que tú estabas solo,
dicen que yo era joven
y que vivía para descubrirlo todo.

Dicen que nos conocimos
Por azares del destino
Y que juntos descubrimos
Para nuestras vidas el mejor camino.

Dicen que teníamos sueños,
Que desafiábamos el tiempo,
Que acariciábamos al viento,
Que adorábamos los momentos
de nuestra mutua compañía.

Pero dicen, dicen que un buen día,
Llegaste a pedir perdón
Destrozando el corazón
De quien más te quería.

Dicen todos, eso dicen,
Aunque también digo yo,
Que robaste el corazón
de aquella chica sincera
Y destruiste el amor que esgrimía
                                             como bandera.

Dicen todos, digo yo,
que te di mi corazón como el más
                                                          tierno trofeo
y lo dejaste sin brillo,
en un rincón del armario
como quien conserva un libro
muy aburrido y algo extraño.

Dicen todos, digo yo
Que destruiste una vida,
Que me arrebataste los sueños,
Que me mostraste el infierno
de vivir en la agonía,
de recordar cada día
que aún te sigo queriendo,
que vivo de nuestros recuerdos
en mi burbuja de amor
y que ya mi corazón desgastado
               por el tiempo,
ha vencido a la razón
y reclama tu regreso.

Pero tú no estás
Solo me queda tu imagen,
Mi amor y aquel perdón
Que nunca di,
Este tiempo eternizado
Y mi devoción por ti.


Me pedirías perdón

Hoy estoy en medio de un viaje,
Voy de paso por la vida
Con la conciencia tranquila
Por haberte amado tanto.

Por saborear el llanto
De tu traición desmedida
Y conservar el encanto
De tu juventud perdida.

Hoy tus huesos carcomidos
Me pedirían perdón,
Si conocieran esta historia,
Mi larga historia de amor.

Ahora estoy frente a tu tumba,
Aquí llora mi corazón,
Por qué escogiste la muerte
Si te quedaba mi amor.


Recuerda

Recuerda amor,
Aquel día en que nos conocimos,
En que nuestros amigos nos presentaron
Y nuestras miradas se cruzaron
Por primera vez.

Recuerda a
La niña de la que te enamoraste,
La que fue ciega y entregó su corazón
A un desconocido
Por primera vez.

Recuerda
Todo lo que luchamos y sufrimos,
O debo decir luché y sufrí,
Por haberte mirado y haberme enamorado
Por primera vez.

Recuerda por primera vez,
Que pude ser tuya eternamente,
Que mi corazón sigue preso,
Que mi alma sangra,
Que mi vida carece de sentido.

Recuerda que tuve que alejarme
 del hombre que amé
por primera vez,
porque me di cuenta de que me hacía
 demasiado daño.

Tuvo que pasar el tiempo
Pero fui fuerte
Y aunque mis piernas temblaban
Y mi cuerpo se estremecía
                                         en tu presencia,
te miré y dije adiós
por primera y última vez.


Te pertenezco

Mi presente existes
porque existes tú,
no tengo futuro
si no es contigo.

Te pertenezco de una forma extraña,
En el silencio de la noche,
Cuando nuestros besos
ahogan las palabras,
en ese ir y venir de miradas
que no tiene otro destino
 que nuestros corazones.

Te pertenezco sin explicación posible,
Sin un por qué
Para nuestro empeño en evitar
Que todos sepan
Que yo te pertenezco.

Esencia

La esencia de un problema,
La solución,
La esencia de mis sueños,
Una ilusión.

La esencia de una vida,
Ser bien vivida,
La esencia de un enigma
Su respuesta escondida.

La esencia de mis versos
Un mundo de amor,
La esencia del amor
Está en el corazón.

La esencia de una guerra
La ambición,
La esencia de la muerte
Un eterno dolor.

La esencia de los días
tomar una lección mejor,
la esencia de un rosal
su más escondida flor.

La esencia de ese beso
Una pizca de locura,
La esencia de los mares
Sus olas llenas de espuma.

La esencia de las noches
Estar siempre oscuras,
La esencia de un minuto
Tiempo para soportar
                                         Algo más que amarguras.

La esencia de una frase
La enseñanza que procura,
La esencia de los hombres
Vivir para eliminar las dudas.

La esencia de este tiempo
Que dedico a la escritura
Llevar a las personas
Un poquito de dulzura.


Luz

Luz,
mucha luz se necesita esta mañana,
Para alumbrar la vida de los que sufren,
Para darle alegría a aquella niña abandonada.

Luz
Que sustituirá la noche
O que en medio de la noche
 Sustituirá el dolor.

Luz
Que traes vida, color y fantasías,
Luz
Que a los pobres motivas a vivir,
Muéstrale el camino
A esos seres confundidos,
Ilumina las almas de los que
Muertos se consideran vivos.

Luz
que traes la esperanza,
luz
que demasiado intensa
haces frágiles mis ojos,
luz
que iluminaste el rostro desecho ya
de aquel niño,
luz que a una mirada certera
un poco de dulzura le impregnaste.

Luz
Ilumina el mundo entero,
Incide sobre todo lo sombrío, oculto y solitario,
Que hasta el rincón más austero
Conozca tu intensidad,
Lleva a todo claridad,
Porque es la luz quien da vida
A toda la humanidad.


Magia

Hay magia en mi mundo
Hoy lo descubrí,
Hay magia en las cosas
Que observamos por ahí.

Hay magia en una carta
Escrita por ti
Hay magia en el cielo
Y en las estrellas que vi.

Hay magia dentro de mí,
Magia de amante, artista y guerrera,
Hay magia en los ojos
de las personas verdaderas.

Hay magia en la noche,
El manto oscuro oculta sus misterios,
Hay magia en las historias
Que me cuentan de otros pueblos.

Hay magia en mi mundo,
Hoy lo descubrí,
La magia de los sueños
Que rondan por ahí.

Magia de un te quiero,
Magia de un perdón,
Magia de un lo siento,
Magia con educación.

Una magia linda,
Magia del amor,
Magia que se encuentra
Aquí en mi corazón.


Continuaré preguntando

Soñador, que soñando vas,
Vendedor que vendiendo vas,
Luchador que luchando vas,
¿Sabes tú qué es la paz?
¿Sabes qué es la eternidad?
¿Sabes cómo o con quién jugar?
¿Sabes tú a quién desearía yo besar?

Soñador, sigue soñando,
Vendedor, sigue vendiendo,
Luchador sigue luchando
Que yo continuaré preguntando.

¿Sabes qué prefiero?

Entre los mares y ríos del universo
Me siento perdida,
Entre tu boca y la esencia de un beso
Se me va la vida.

Entre un ángel y un alma confundida
¿qué me pasaría?

Entre morir y vivir
Elijo vivir donde tenga vida,
Entre soñar y desear,
Prefiero soñar y en mis sueños deseo.

Entre una lucha eterna
Contra este tiempo loco
Y una noche fría sintiendo que te toco
¿sabes qué prefiero?
Una noche eterna
Y de tu amor un poco.
Perdón amor

Perdón amor,
Perdón por perder el valor,
Perdón por no luchar y
Defender nuestros sueños
Perdón por tantas cosas.

Perdón por ser yo
La que tiene tu corazón preso,
Perdón por hacerte sufrir y
Esperar tanto tiempo,
Perdón por esconder mis sentimientos.

Perdón porque te vas
Sin probar mis besos,
Perdón por ser tan dura,
Perdón por mis defectos,
 perdón por no olvidarte,
Perdón porque te quiero.


Un ángel guardián

Un ángel guardián te cuida,
Vela siempre tus sueños,
Aleja de ti
La tristeza y el llanto.

Un ángel guardián
No es un dios no es un santo,
No gobierna el universo,
Pero en la noche con un beso,
Te brinda tranquilidad,
Te demuestra que no estás
Solo en este mundo,
Que no existe lo imposible,
Que no hay nada inalcanzable,
Que solo los incapaces a lamentarse se aferran
Y que el que por sus sueños no lucha
No merece un lugar
Sobre la faz de la tierra.

Tu ángel guardián,
Puede ser obra de tu imaginación,
Tal vez un enanito
Que habita en alguna flor,
Un duende, una mariposa,
Alguien que te brinde amor,
Cariño y comprensión.

Si le cuentas a la gente
Que un ángel cuida de ti,
Puede que no te crean
O les parezca infantil,
O que te tilden de loco
Y que se rían de ti. 

Pero tú  y tu angel
Serán dos en uno para siempre,
Mientras él cuida de ti
Tú lo proteges de la gente,
De esas personas que no comprenden
O no quieren comprender
Que la vida es una sola
Y no hay nada que perder
Por creer en algo lindo
Que no han llegado a conocer.

Ruido

Este Silencio inmundo
En el que no se escuchan más
Que los gritos de mi constante soledad,
Me lleva a ti.

Este silencio cruel,
Que se rompería con el tenue movimiento
De tus labios
Me hace pensar que existe
Algo más allá de los sueños,
Algo más allá de ese cosquilleo
Que estremece mi cuerpo
Cuando llegas y te apoderas de mí,
De este espíritu que vaga
Por un mundo que no sabe
si realmente existe,
que lucha contra una realidad que es
para algunos la más simple fantasía.

Este silencio inmundo,
Este silencio cruel,
Me recuerda que no estás,
Que mis deseos de vivir
Andan tras tus pasos,
Que no me pertenezco,
Me recuerda que me entregué
A la pasión que habitaba mi cuerpo,
Una pasión motivada por ti.

Me recuerda que ya no soy nada,
Que he muerto en vida,
Que me olvidé de mí,
Que tantas noches en vela
Abrazada a una almohada
No impedirán que se apague la llama,
La llama de los sueños en los que
Yo te amaba.

Este silencio inmundo,
Esta soledad desesperada,
Este ir y venir de futuros
En medio de un presente
que no me sabe a nada,
me dicen que sigo aquí,
en espera de ti,
me dicen que sigo enamorada.

Pero yo sobrevivo
Con mi amor moribundo,
Con los sueños que quedan
Y los numerosos recuerdos
De cada madrugada,
De cada noche eterna
En la que con tus cabellos jugaba.

Tal vez, cuando pasen los años,
Cuando llegue el olvido
Y yo entierre mi amor,
Aprendas a quererme,
Comprendas que fui yo
Quien realmente te amó
Y llegará entonces
Este silencio inmundo,
Este silencio cruel,
En el que únicamente escucharás
Los contados alaridos
de tu imponente soledad.



Complicidad

Esta noche no existe nadie
Más que tú,
Tú y tu fantasma recorren mi cuerpo
Cual capricho divino,
Te haces dueño inmediato
De esta cama
Que ha dejado de ser mía
Para convertirse en nuestra.

Esta noche no existe más que
Dos respiraciones entremezcladas,
No existe más que
Unos sueños eróticos,
No existe más que este olor a hombre y mujer,
No existe más que
Dos cuerpos desnudos,
Dos corazones
Y una cama.
















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